En la segunda prescripción hay que re interrogar al paciente de los mismos síntomas de los que se quejó en la primera consulta, de lo que podemos deducir varias opciones:
- Mejoría mental y física: significa que el medicamento es el correcto, el simillimum o se ha logrado un nivel alto de semejanza.
- Mejoría mental y agravación física: significa que el medicamento posee la semejanza mental pero que probablemente sea una potencia o dinamización demasiado alta.
- Agravación mental y mejoría física: Significa que el medicamento tiene poca semejanza, o sea que es paliativo o supresor y va en contra de la Ley de curación; hay que retomar el caso.
- Agravación mental y física: Significa que el medicamento es incorrecto; ni la potencia ni el medicamento es el adecuado para el paciente. No indicar otro medicamento hasta que no cese la acción de este, (o antidotarlo) y retomar el caso.